Con un punzón pinchamos justo en el medio, incidiendo a continuación en ese punto con un berbiquí.
Basta entonces tirar para sacar el tapón de plástico.
A continuación cubrimos de pegamento las dos caras, pistolet y chapa, colocando está última sobre la anterior.
Con un martillo de plástico asentamos con pequeños golpes hasta que quede completamente a paño. Si quedan restos de pegamento, con la ayuda de un paño empapado en alcohol, limpiamos hasta eliminarlo totalmente.
Bastará entonces dejar secar las horas que indique el pegamento utilizado para tener nuestro rifle listo para usarse y un poco mas nuestro.
Viva la caza. Long life to hunting.
Viva la caza. Long life to hunting.