Ahí tiene la realidad de la situación actual del lobo. Nos lo envían desde el Valle de Campoo, Cantabria, a plena luz del día los lobos paseándose delante a las casas, matando ganado a diario. Frente a estas imágenes no sirven las interpretaciones ni las medias tintas. No hay peligro de extinción para el lobo ni nada que se le parezca, nunca ha habido tantos.
Hay un problema de enorme gravedad que está poniendo en peligro la supervivencia de familias del mundo rural solo porque al sectarismo ideológico de la izquierda mas radical ve en esta mentira la forma de seguir ganando dinero y poder.
Imagine vivir ahí sabiendo que cada vez que su hijos salgan de casa pueden encontrarse con los lobos ¿A alguien en su sano juicio puede parecerle normal esto?
Nadie pide extinción, solo un control que haga posible la convivencia entre hombre y lobo.
Tolerancia cero con los ecoanimalistas, no hay peor lacra para el mundo rural.
Viva la caza. Long life to hunting.