Los gatos asilvestrados son todo un problema para la fauna. Ya sean cinegéticas o protegidas, los mininos se convierten en un auténtico azote especialmente en época de cria. Se rasgan las vestiduras los animalistas cuando se pide su control, eso de matar un gatito no les entra en la cabeza, aunque sus campeos supongan poner en serio peligro para especies muy vulnerables. Si tiene constancia de que en su coto hay gatos asilvestrados, pida autorización y no lo dude, pocos cartuchos gastará tan buen gastados, habrá hecho un gran trabajo. Viva la caza. Long life to hunting.
Los gatos asilvestrados son todo un problema para la fauna. Ya sean cinegéticas o protegidas, los mininos se convierten en un auténtico azote especialmente en época de cria. Se rasgan las vestiduras los animalistas cuando se pide su control, eso de matar un gatito no les entra en la cabeza, aunque sus campeos supongan poner en serio peligro para especies muy vulnerables. Si tiene constancia de que en su coto hay gatos asilvestrados, pida autorización y no lo dude, pocos cartuchos gastará tan buen gastados, habrá hecho un gran trabajo. Viva la caza. Long life to hunting.