La “Casina”, la perra de mi!amigo Carlinos el de Prieres , hoy no bajó del monte, la devoró el lobo en Brañagallones, RRC de Caso, PN de Redes.
De nuevo un perro que se va con el jabalí, que no vuelve. Al buscarlo da la señal del collar parado y cuando se está cerca sale como un misil. En realidad el lobo corre cuando siente a la gente próxima llevándose la cabeza del perro con su collar GPS.
Desgraciadamente son habituales lo de los perros devorados por los lobos en plena cacería, algo que por muy repetido no deja de ser trágico, diría más, inadmisible. Se pone de manifiesto la terrible brecha existente entre la ciudad y el campo. En una época donde se nos machaca con el maltrato animal, donde los perros y gatos urbanos están más protegidos que los niños, un perro de caza parece no importar a nadie…a no ser que el animalismo pueda usarlo con alguna mentira para criminalizar al cazador. Luego llega el ecologismo y el lobo, el cuento inventado del que tantos chupan. Siempre hay pocos, siempre los daños son mínimos, siempre los ganaderos y cazadores se quejan de vicio. El problema es que la verdad acaba saliendo a la luz y las fotos y noticias de la masacre del lobo ruedan a diario por redes y medios. Lo triste del tema es que la protección absoluta está hecha a la carta de aquellos que ni sufren ni pagan los daños, de aquellos que a los que el descontrol del lobo no les cambia nada. A los que les dañen que les parta un rayo, mientras me sigan llegando subvenciones para estudios y comedias…
El lobo está fuera de control, es evidente que las cifras oficiales del numero de lobos está muy por debajo de la realidad. El lobo debería cazarse como los raposos, cuando sale, aprovechando la oportunidad…y no se preocupe que no se extinguen. No hay derecho a que te maten una perra de caza y tengamos que aguantar sin hacer nada ante semejante lobada , sin poder defendernos. Ánimo Carlos, gran perra la “Casina”, esperemos que algún día esto cambie, ya está bien de tener descerebrados anticaza decidiendo por nosotros.
Nadie pide extinción, solo un control que haga posible la convivencia entre hombre y lobo.
Viva la caza. Long life to hunting.