Mi amiga andorrana @merimarc se encontró con este pequeño corcino muerto. No está mal recordar que NUNCA se debe tocar a los corcinos que nos encontremos en el monte, no están perdidos, su madre los dejó ahí escondidos. Si se tocan el olor que se deja en ellos hace que la madre desconfíe, abandonándolos, algo que no es descartable que haya pasado en este corcino encontrado ya muerto por mi amiga Meritxel. Viva la caza. Long life to hunting.