No hay mayor respeto por la caza abatida que pase a formar parte de nuestra mesa. La carne de monte es un manjar exquisito y natural. Mi amiga Lucia Rubio Martos nos muestra como debe hacerse, desollando, troceando y empaquetando ordenadamente. Cada uno de ellos se convertirá en una futura delicia para el paladar. Buen trabajo amiga, ya me estoy chupando los dedos...
Viva la caza. Long life to hunting.