Mientras los problemas con el lobo crecen y amenazan el pan de miles de familias, los ecoanimalistas se disponen a imponer su dictadura. Estos no tienen complejos, se están hinchando a subvenciones y ahora a por el lobo. Ya tardaba el Santón de los Marley en asomar las barbas. No se como andarán sus problemas con la justicia, lo que está claro es que con sus compañeros podemitas en el sillón y Teresita Ribera en el Ministerio, lo del lobo se veía venir. Argumentan toda esta panda de “tragapanes” en base a expertos científicos, los mismos posiblemente que los del coronavirus ¿No ve que nos estamos acostumbran a ver como miente esta banda sin pestañear? Y como contraste la fotografía que me envían hoy mismo de un perro devorado durante una batida en la Coruña, la evidencia de una realidad: nunca hubo mas lobos, nunca tuvieron menos presión, nunca hicieron tanto daño. Que un “pájaro contrastado” como el Predicador esté al frente de esta negociación huele que apesta...debe haber tajada y grande. Mientras en la calle paro y necesidad...
Nadie pide extinción, solo un control que haga posible la convivencia entre hombre y lobo.
Viva la caza. Long life to hunting.