Vaya tela, tanta provocación estaba claro que un día acabaría a tortazo limpio. La violencia nunca está justificada pero tanto insulto, tanta amenaza un día u otro acaba en esto. Mucho han aguantado. Dejando las escopetas abiertas y en el duelo dejan claro que la violencia la están provocando los sectarios. Cobardes cubriéndose las caras, desgraciados. Esperemos que esto no se vuelva a repetir. Aunque sobren las ganas y tengan mucha falta, mejor que se enfrenten las fuerzas de seguridad. Actuando nosotros al final todavía dirán que tenemos la culpa.Puñetera escoria de violentos, sectarios e intolerantes. Tolerancia cero con el ecoanimalismo.
Viva la caza. Long life to hunting.