Ni con datos, ni con explicaciones, ni con “leches en vinagre”. Con semejante escoria no hay ninguna posibilidad de llegar a puntos de encuentro. Alguien que se alegra públicamente, haciendo incluso burla, de la muerte en accidente de un ser humano simplemente por ser cazador, solo merecía que la ley le aplastase con toda su fuerza. Desgraciadamente seguimos sin que se nos defienda de verdad, no conseguimos abrirnos a la sociedad, ni mucho menos hacernos respetar. Bla bla bla bla por las redes, pero eso sí solo entre nosotros, hacia fuera ni asomamos. La única baza posible, la política , seguimos siendo incapaces de utilizarla para nuestro beneficio, precisamente por estar politizados hasta los cimientos de las instituciones que nos deberían defender. Si la fuerza que tenemos, demostrada en la manifestación de Madrid, la estuviésemos utilizando contra quienes nos agreden, aquí no se movía ni Dios contra nosotros y se estaría legislando para que a la escoria que se alegra de la muerte de un cazador le cayese una multa que los dejara temblando, penando con contundencia el odio que trasladan. Muy al contrario se seguirá legislando contra la caza porque la fuerza de la manifestación se consiguió disipar, evaporar. El pico a Jennifer Hermoso o los insultos a Vinicius han puesto al país patas arriba, mientras que chusma soltando por las redes barbaridades, alegrándose de la muerte de un torero, de un niño con cáncer o como en este caso de un cazador, quedan impunes ¿Por qué? Pues por que estamos abandonados, politizados, utilizados o silenciados según la conveniencia ¿No lo ve hombre? ¿No se da cuenta que mientras seguimos que si rojos que si azules ellos van p’alante y nosotros para atrás…?
Mi más sentido pésame a la familia del cazador fallecido. DEP
Viva la caza. Long life to hunting.