Cálmate Michel, me digo a mi mismo. Es hora de enfriar, pensar y responder con eficacia con los juristas, los insultos y amenazas no sirven para nada. Tenemos enfrente a quienes no les importa arruinar al mundo rural, sumirlo en una debacle ecológica o generar accidentes que puedan llevar a la tumba a ellos mismos o a sus propios hijos. Esta mañana he hablado con todos aquellos que realmente tienen capacidad de actuar ante la posible prohibición del TSJ de CyL. Todos ellos, entre los que se encuentran Federaciones y Artemisán, están trabajando contrarreloj dispuestos a llegar hasta donde haga falta para frenar este sin sentido. Me alegra comprobar como están dispuestos a
plantar batalla tanto contra PACMA como contra el propio tribunal, sobre el que cada vez se afianza mas la idea de que algo “no cuadra”, una sentencia así parece imposible que sea dictada por alguien con sentido común. Y llegado este punto debemos exigir que estos irresponsables del animalismo aprendan de una vez por todas que con el pan de los demás no se juega. Cada daño de una especie cinegética en la agricultura y ganadería, cada accidente, el montante de cada permiso de caza que un particular, coto, Junta Local o Administración deje de percibir, debe exigirse que lo pague PACMA, no pueden buscar la ruina a miles de familias y marcharse “de rositas”. Son los responsables de los daños y perjuicios que va a ocasionar su demencia y sectarismo ¿Que no quieren caza? Pues que lo paguen y si no tienen pasta a la “trena”, mandar en el campo desde la ciudad, degollando sin piedad las formas de vida tradicionales, no puede salirles gratis. Por mi a esta puñetera lacra ni agua, no hay peor azote para en mundo rural que los animalistas y ecologistas radicales.
Viva la caza. Long life to hunting.